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CAZAS AEROESPACIALES
Un battlemech dañado puede aguantar en el campo de batalla si es necesario, y en caso de caer destruido siempre puede ser útil para sacar de él piezas de repuesto y otros componentes, mientras que un caza estrellado es del todo inservible. Si en el éjercito de toda casa sucesora existe una media de 1 caza por cada 12 mechs, en una unidad mercenaria esta relación de proporción pasa a ser de 1 por cada 24 mechs en el mejor de los casos. Nosotros aconsejamos tener el menor número de cazas, aunque siempre son útiles. Antes de moverse hacía el planeta destino de cada contrato, un comandante puede valorar la utilidad de sus unidades aéreas y si su situación se verá comprometida, y basándose en esos datos tomar la decisión de llevarlos o no. Siempre se pueden dejar en el hangar del planeta base bien protegidos. Los cazas poseen un gran númro de armas, muy superior al arsenal que pueda montar un battlemech, y por ello son temibles cuando apoyan a unidades terrestres en el campo de batalla. Un buen empleo de estas unidades combinadas con bombas puede ser decisivo en una batalla crucial. La organización habitual que siguen los cazas en la Esfera Interior es la siguiente:
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